jueves, 3 de marzo de 2011

Capítulo 2 ♡

Yo y mi mamá nos quedamos viendo quien entraba

T/p: (abrió y era…) Héctor, amigo mío (sonrió), pasa Héctor: (entro) Permiso (sonrió)

T/p: Ven, pasa (lo guío hacia donde estábamos yo y mi mamá), Ella es (Nombre de tú mamá) y ella es mi hija (Tu nombre) (sonrió)
Héctor: (miro a mi mamá y le sonrió) Un gusto conocerte (Nombre de tú mamá)
T/m: El gusto es mío (sonrió)
Héctor: (me miro y sonrió) Igual de hermosa que la madre (miro a mi mamá y luego a mi)
Yo: Gracias (sonreí)
T/p: No te vengas a hacer el lindo aquí (bromeó)
Héctor: (sólo sonrió)
T/m: Bueno, pasemos a la mesa (sonrió)
Héctor: Claro, pero primero tengo que ir a buscar algo (sonrió)
T/p: Okay, pero apura (sonrió)
Héctor: Ok (salio de la casa y a los 5 minutos volvió, con una botella de vino, la cual se la entrego a mi papá)
T/p: Esto era lo que faltaba, gracias amigo (sonrió mirando la botella de vino)
Héctor: De nada (sonrió)

Bueno pasamos a la mesa y cenamos, fue una cena muy agradable, Héctor era muy simpático, nos reíamos con las anécdotas que contaban con mi papá; Después de que todos habíamos terminado de cenar, ayude a mi mamá a retirar la mesa y a lavar la losa, cuando terminamos me fui a mi pieza, mis padres quedaron abajo con Héctor conversando.

Ya ah pasado un mes y las visitas de Héctor cada vez son más a menudas, siempre va a cenar o a almorzar, Estaba con mi papá viendo fotos, cuando sonó el timbre

T/p: Yo voy hija (me sonrió)

Yo: Bueno (le sonreí)

Mi papá fue y abrió, era Héctor que venia a almorzar

T/p: Amigo! (sonrió), ven pasa

Héctor: Hola (sonrió y paso), Hola (tu apodo) (me sonrió)
Yo: Hola (le sonreí)

No los quise molestar y me fui donde Eva, que estaba en la cocina, nos pusimos a conversar, mi mamá de ves en cuando iba a la cocina, ya que ella iba a cocinar hoy, pero le faltaban cosas, así que fui yo, Eva y mi papá a comprar a un negocio que estaba cerca de la casa, pasamos las cosas por la caja y salimos.


Mientras en la casa:


(Narra tú mamá)

Héctor: De nuevo solos linda! (me dijo en un tono seductor y acercándose lentamente ami)

Yo (tú mamá): (le sonreí coqueta)
Héctor: (llego asta mi y me tomo de la cintura) No sabes cuanto te eh extrañado (me sonrió) Yo: (le sonreí) Y yo a ti (puse mis brazos alrededor de su cuello)
Héctor: (sonrió y se fue acercando lentamente a mi, hasta rozar sus labios con los míos)
Yo: (no me aguante más y lo bese)
Héctor: (entre besos me dijo) Extrañaba tus dulces labios
Yo: (sólo lo seguí besando y desde ese momento no dejamos de besarnos como desesperados)

Donde ustedes:


(Narras tú)

Íbamos hacía la casa cuando a mi papá se le ocurrió comprar un vino, era lo que faltaba así que yo y Eva nos fuimos a la casa con las demás cosas; Entre yo primero, no vi a nadie en el comedor así que fui directo a la cocina y allí es en donde veo una escena que no me agrado mucho; Mi mamá besándose con Héctor?, no, debe ser una confusión, mi mamá nunca engañaría a mi papá, ella lo ama, no, no es lo que parece-pensé; Entre a la cocina y dije

Yo: Donde dejo las cosas mamá (se lo dije como si no hubiera visto nada y le sonreí)

(Narra tú mamá)

Nuestros besos con Héctor eran cada vez más apasionados, se nos había olvidado por completo que en cualquier momento podía llegar mi esposo, Eva o mi hija a la casa, pero sin darnos cuenta mi hija entro y dijo

Tu: Donde dejo las cosas mamá

En ese mismo instante que escuche su voz me separe rápidamente de Héctor, mi corazón se paralizo al verla ahí, como si nada, sonriéndonos y esperando mi respuesta

Yo: (mire a Héctor y luego a ella) Emm, de-déjalo encima de la me-mesa (le sonreí nerviosa) Tu: Ok (me sonrió y dejo las bolsas encima de la mesa), Te pasa algo mamá? (me preguntó como si nada)

Yo: No, no me pasa nada hija (se lo dije ya más tranquila, pues al parecer no se dio cuenta de nada)
Tu: Bueno, yo me voy (salió de la cocina y luengo entro Eva ordeno las demás cosas)

(Narras tú)

Salí de la cocina como si nada, y me fui a mi pieza; allí me recosté en mi cama y me puse a pensar en lo que había visto, mi cabeza estaba llena de preguntas las cuales trataba de darles respuesta, pero se me hacía difícil, ni siquiera yo estaba segura de lo que había visto, o aló mejor si, pero por miedo a lo que vi, por miedo a que sea verdad no lo quería aceptar; Sin darme cuenta una lágrima rodó por mi mejilla.

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